Me temo que el sitio donde yo vivo no es compatible con el arte contemporáneo. Por desgracia.
El pasado 2 de Mayo la Comunidad de Madrid inauguró por todo lo alto el Centro de Arte Dos de Mayo (CA2M) en la Avenida de la Constitución de Móstoles. Hoy me he enterado por el Blog de mi paisana y colega Paloma Ortiz que el flamante museo recibió 18.000 visitas desde su inauguración hasta septiembre.
Teniendo en cuenta que 10.000 de estas visitas se produjeron durante el fin de semana de la inauguración, tenemos una cifra de menos de 3.000 visitas al mes durante los cuatro meses siguientes a la apertura. Una cifra muy modesta comparada con la inversión regional (12’2 millones de euros) y la ambición con la que se ha construido este centro. El CA2M acoge la colección de arte moderno de la Comunidad (1.300 obras), amén de exposiciones temporales, y está dirigido por el prestigioso galerista Ferrán Barenblit, exdirector del Centre d'Art Santa Mònica de Barcelona.
Simplemente para hacernos una idea, el Caixa Forum del Paseo del Prado recibió un millón de visitas en sus siete primeros meses de funcionamiento.
Realmente, no hacen falta estadísticas para ver que el CA2M está vacío. Estuvimos hace un par de meses y había más azafatas que visitantes. Lo que es una auténtica lástima, porque está bastante bien: es una exposición pequeña para lo enorme del edificio pero con fondos de calidad y un buen planteamiento como Museo.
Creo que es ocioso intentar explicar porqué no va más gente a este museo. A ver. ¿Realmente alguien creía que una galería de arte contemporáneo iba a tener éxito en Móstoles?
Lo digo, de verdad, sin ningún ánimo de ofender a nadie, porque, para empezar, yo soy de Móstoles.
La Comunidad de Madrid, dice, en la web del CA2M lo siguiente:
El centro responde a la voluntad de la Comunidad de Madrid de crear infraestructuras culturales, no solamente en la capital, sino también en los municipios de la periferia, especialmente en aquellas poblaciones en las que se concentra la población más joven y está destinado no sólo al público del sur de la región, sino a un sector más amplio local, autonómico, nacional e internacional.
Cosa que está muy bien, por supuesto. Yo soy el primero que creo en la ciudad policéntrica. Pero también creo que Móstoles necesita muchas cosas más antes que este museo para convertirse en un polo de atracción: necesita centros de trabajo, necesita una cultura de base, puntos de reunión
Móstoles a día de hoy no es que no atraiga. Es que ejerce una poderosa fuerza centrífuga sobre determinada gente. Casi todos mis amigos del barrio que han estudiado en la Universidad se han ido. Sigo sin querer ofender: simplemente es que es así.
Un sitio como el CA2M funcionaría seguro en Madrid. Incluso en Alcobendas, Alcalá o Getafe. Pero en Móstoles falta la base. No se puede empezar la casa por el tejado… al menos si es verdad que se quiere que haya un diálogo entre la cultura y la ciudad (como creo que dijo Barenblit).
Por no tener, no tenemos ni cine. Tenemos un museo de arte moderno y un festival de cine y no tenemos una sala comercial de cine... ¿soy el único que creo que algo falla aquí? Quieren imponer cultura de élite en un sitio donde no hay cultura popular.
La casona
En ninguna ciudad de 200.000 habitantes, periférica y de clase obrera, habrá nunca un público masivo para el arte contemporáneo... sobretodo si se han descuidado todas las demás expresiones de cultura más populares. Pero el CA2M no dialoga con Móstoles por otra razón, además: porque nació de espaldas a él.
El edificio donde se ubica es un claro ejemplo de esta bonita parábola de Azagra.
El Ayuntamiento le dijo a los mostoleños que lo que se iba a hacer era restaurar La Casona, una antigua casa de labor castellana del s. XIX. Un inmueble que tenía un innegable valor histórico y languidecía en el solar donde ahora se levanta el CA2M.
Pero al poco de comenzar las obras mucha gente descubrió con horror que de la Casona no dejaban nada más que la fachada, tras una laboriosa demolición técnica. Y que luego, esa misma fachada era ocultada tras unas planchas de un material traslúcido. (ver foto).
Desilusión: muchos esperaban que el Museo que ahí se construía fuese a albergar trillos y tinajas y un escenario para bailes regionales, -en consonancia con la idea de restauración de la Casona que el Alcalde Esteban Parro aireó cuando ganó sus primeras elecciones hace 5 años-, y se encontraron con... ¡arte contemporáneo!
Por supuesto que sé que aporta mucho más un centro de arte contemporáneo que la antedicha mierda folklórica; pero, coño, no cuesta nada, ya que te has gastado 12’2 millones de euros, explicar un poco de que va la vaina a la gente. Cuando se abrió se gastó abundante papel en pasquines y fin de la historia. Desde entonces no he visto un solo cartel en la ciudad explicando que es lo que se expone en el Museo.
Volviendo al principio, habría que haber aplicado un programa para compatibilizar a la gente de Móstoles con su museo. Y no me vale que el supermuseo CA2M sea gratis. Hay otras muchas barreras que dificultan el acceso a la cultura. Ojalá se gastase en derribarlas la décima parte de lo que se gastó en derribar la Casona.
4 comentarios:
yo si que lo leo aunque no escriba así que no te enfades
Caballero, no recordaba este blog (lo leí cuando lo de los franceses) y sin embargo ha mejorado batante. Este articulito sobre el centro de arte... me parece genial. Toda una exposición de la idiosincrasia mostoleña, y de la desconexion del gobierno local con su pueblo. Un 10.
por cierto, soy Galindo, ue no lo he puesto. Un saludo.
A ver si nos vemos, Galindo. Y muchas gracias por tus palabras! Así que SFR al final. Suena bien. Vote SFR!!
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